El Golpe de Calor en Perros

La “hipertermia”, más conocida como golpe de calor, es un trastorno físico que ocurre cuando la temperatura corporal asciende a niveles superiores a los normales y el sistema de termorregulación del cuerpo no puede funcionar correctamente, es decir, es incapaz de enfriarse sólo. Usualmente esto ocurre como consecuencia a la exposición a temperaturas muy elevadas durante el verano. Los perros, a diferencia de los humanos, carecen de glándulas sudoríparas, por lo que sus mecanismos para eliminar el calor se reducen a 3:

• El jadeo.
• El sudor exclusivamente a través de las almohadillas en sus patas.
• A través de zonas con poca presencia de pelo, como el abdomen.

¿Cómo se manifiesta? Existen ciertas características y señales que nos pueden ayudar a determinar si nuestros perros están sufriendo un golpe de calor o no. En primer lugar, hay que tener en consideración que la temperatura regular promedio en perros es de 38°, en los casos de golpes de calor, esta puede llegar a elevarse hasta los 42°. Algunos otros síntomas pueden ser:

• La aceleración del ritmo cardiaco
• Jadeos más constantes de lo normal con presencia de babas
• Respiración rápida y nerviosa
• Temblores
• Debilidad muscular y pérdida de equilibrio
• Vómitos
• Color azulado de la mucosa y encías debido a la falta de oxigenación en la sangre

¿Cómo tratarlo? Si estamos frente a un caso o sospecha de golpe de calor en nuestros perros, lo primero que tenemos que hacer es mantener la calma y actuar con rapidez. Es importante que contactemos a nuestro médico veterinario y sigamos sus indicaciones. Como auxilios inmediatos, podemos realizar lo siguiente:

• Disminuir su temperatura corporal mojándolo con agua a temperatura ambiente (ni muy fría ni muy caliente) debemos evitar cambios bruscos de temperatura.
• Evitar cubrirlo con toallas o utilizar hielo o baños de agua fría.
• Hidratarlo, darle de beber agua sin acelerarse.
• Estar en constante comunicación con el veterinario hasta llegar a la clínica

Es importante estar atentos y no dejar pasar ninguna alerta, ya que los golpes de calor pueden llegar a tener consecuencias irreversibles como hemorragias, insuficiencia renal o hepática, infecciones sistémicas, daño cerebral e incluso fallo en varios órganos Existen algunas prácticas que podemos implementar con nuestras mascotas, sobre todo durante el verano, para evitar estas situaciones que pueden llegar a ser muy angustiantes. Algunas de ellas son:

• Al sacarlo a pasear, lleva siempre una botella de agua o un bebedero portátil para hidratarlo y mojarlo constantemente.
• Procura caminar por la sombra para proteger sus almohadillas y no salgas en las horas donde el calor es más intenso. Es preferible salir muy temprano en la mañana, durante la tarde cuando ya haya bajado el sol o en la noche.
• NUNCA dejes a tu perro dentro del carro o en un espacio pequeño sin ventilación adecuada.
• En las épocas más calurosas del año, puedes ayudarlo recortando un poco más su pelo que de costumbre.